La crítica social siempre es mejor hacerla con humor. Como se hace en Cádiz, naturalmente. Y uno de los maestros fundamentales del Carnaval de Cádiz es, sin duda, el Selu.
Aquí tenéis una de las más irónicas, radicales y geniales críticas que se han hecho nunca a la crisis hipotecaria, de parte de unos banqueros con mucho arte y muchísima retranca: "Las Verdades del Banquero".
Letra
Ay, qué me gusta ver en la puerta el banco
a esas parejitas ya casaditas
pidiéndome una hipotequita pa una casita
con sus caritas descompuestitas...
¡Ole!
Cuando un joven a su novia
le declara amor eterno
y la lleva al altar,
sabe que tarde o temprano
yo también via estar metío
en tó esa eternidad,
porque una vivienda digna le via dar yo,
le doy lo que no le da la Constitución,
aquí eso es lo importante:
un techo, lo de menos es el dinero... (Risa)
Ea, po aquí está la casa de vuestros sueños
pa disfrutarla.
Ya se podéis olvidar de tó,
de tó menos de la hipoteca.
Ahora solo a preocuparse de tener niños,
y tener pa darles de comer:
esperemos que a los niños
les guste el pan con manteca.
Y lo tranquilito que vais a estar
con los pies estiraos
en ese salón de dos metros y pico... Ohhhhh,
y ver que los niños
no corretean por los pasillos
porque es que no hay ni pasillos... Ohhhhhh,
Y el día que llegue
la última letra de la hipoteca,
los dos con noventa y cinco años
ya relajao con su champán... Ohhhhh.
Cucha, mira, chavalote,
tú deberías a mí de quererme
mucho más que a tu mujer,
porque el amor dura dos días,
pero esta hipotequita que te acabo de meter,
esa es pa to la vía.